Podar una rosa es el cuidado más importante que requiere un rosal además de regarlo cada día si así lo requiere. Si sigues al pie de la letra lo que te vamos a explicar en este artículo podrás conseguir unas rosas fuertes, bonitas y sanas, sólo debes saber cómo y cuándo podarlas. Podar es la forma de eliminar la madera muerta y así contar con bonitas rosas.

Cuándo podar una rosa

Se puede hacer en diferentes momentos del año. Esta labor se debe hacer 2 veces al año, una a finales del verano y la otra al acabar el invierno invierno, una poda que tiene directa relación con el rejuvenecimiento y vitalidad para la siguiente floración. Al menos se deberá podar el rosal al menos una vez al año, aunque pueden realizarse diversas podas. En regiones con un clima suave, la poda se puede efectuar antes de tiempo.

Cómo podar una rosa

Al podar una rosa, deberemos quitar los chupones y la madera muerta, es decir, todas aquellas ramas que no estén sanas o no produzcan flores. También deberás eliminar las flores marchitas y frutos, que además de dar mal aspecto al rosal, consumirán energías. Siempre deberemos conservar las ramas jóvenes y aquellas que tengan yemas, es decir, de donde después saldrán las rosas.