El árbol del olivo, olivera, Olea europaeao aceituno es un árbol de los más bonitos que existen. Su fruto es la oliva o aceituna, un alimento empleado en multitud de recetas de cocina y remedios caseros para la salud.

El olivo es un árbol de hoja perenne. Siempre de color verde, de copa ancha e irregular. El grueso tronco y las ramas se caracterizan por ser muy retorcidos y nudosos.

Su corteza es áspera, de aspecto fisurado o agrietado y su color es entre un color gris y plateado.

Es un árbol alto, pues mide alrededor de 10 metros de altura, pero en algunas regiones del Mediterráneo no es raro encontrar ejemplares de doble altura. Esto es, algunos ejemplares pueden superar los 15 metros y llegar incluso a los 20 metros de altura.

En tipo de olivo verde las hojas son pequeñas, alargadas, grises verdosas por arriba y blancuzcas por abajo. Crecen a lo largo de los tallos y opuestas una de las otras. El tamaño de las hojas del olivo es de entre 3 y 10 centímetros de largo y de entre 1 y 3 centímetros de ancho. 

Su fruto, la conocida oliva o aceituna, es carnosa y de forma ovalada, y cuando aún no ha llegado a la maduración tiene un típico color verde (verde “oliva”, se dice), pero no se hace rosácea, violácea o negra hasta cuando está madura. De ella se extrae el aceite de oliva.

El olivo o árbol de la aceituna es un árbol que crece lentamente, pero en compensación es muy longevo. Puede vivir varios cientos de años, y existen algunos que se cree que tienen más de 2.000 años de edad.

Es bastante exigente en lo que respecta al clima. La perjudica mucho el frío, tanto es así que temperaturas inferiores a ocho grados bajo cero la pueden matar.

Sus raíces son muy largas y profundas, para poder adquirir de la tierra la poca humedad que necesita. Referente al suelo, el olivo o árbol de aceitunas, se conforma con poca cosa, y así lo vemos crecer incluso en tierras sumamente pobres, pedregosas o rocosas.

Existe una versión asilvestrada de la planta de olivo: el acebuche (Olea europaea var. sylvestris). Se puede distinguir fácilmente de la variedad que se cultiva por las espinas de sus ramas, aspecto de arbusto, hojas notablemente más redondeadas y fruto más pequeño.

Origen del los olivos y expansión

El origen del olivo es algo dudoso, pero parece ser que proviene de la antigua Mesopotamia (actualmente Irak y Siria), hace ya más de 6.000 años. En la antigüedad, era muy frecuente en los países bañados por el mar mediterráneo

Pero con el paso del tiempo y el conocimiento del aceite de oliva y todas sus propiedades gastronómicas se fue expandiendo a muchos países del mundo, incluido algunos países de América e incluso hasta Australia.

 

El fruto del olivo: la oliva o aceituna y su recolección.

 

La mayoría de las olivas o aceitunas son exprimidas en máquinas llamadas almazaras: el aceite de oliva que se extrae es uno de los más apreciados y saludables condimentos para la comida.

Una pequeña parte de estos frutos es utilizada para el consumo directo. Las olivas de mesa se conservan en salmuera, es decir, en agua convenientemente salada.

La cosecha de la oliva o aceituna, actualmente se puede realizar de diversos modos. Los principales son los siguientes:

  • La recolección a mano, fruto a fruto, operación que se llama deshoje.
  • El zarandeo de las ramas y posterior recogida a mano del suelo.
  • El sistema de vareaje.
  • Solo tomar del suelo solo las olivas caídas espontáneamente.

Los mejores métodos son el zarandeo y el deshoje. El vareaje es desaconsejable, ya que con el tiempo, puede ocasionar daños en el árbol.

 

España es el primer país productor de aceite de oliva del mundo, y concretamente en la provincia de Jaén se da la mayor concentración de olivares (que han sido cantados por diversos poetas).

El aceite de oliva es uno de los productos agrarios de más sólida tradición exportadora en España, hasta tal punto que, por su riqueza, alguien lo llamó “oro del campo”.